Black Belt, gran palabra.
Luego de hacerme un Hara-Kiri mental por no asistir al seminaro, del cual me dijeron que estuvo muy bueno, me puse a pensar en la famosa, por lo menos para mi, palabra "BLACK BELT".
Me acordé también del sentido de: "...a medida que se oscurecen los cinturones, se aclara la mente", frase dicha por Master Sergio Cantreras en una graduación. Nada más cierto.
Me acordé del primer día de Cinto Amarillo, cuando practicaba un sistema japones y, viendo a los más expertos, me preguntaba cuando yo sería un Cinturón Negro.
Éste Noviembre cumplí 9 años en cinto Negro 1º grado, y aún recuerdo cuando, al día siguiente de mi graduación, llegué temprano al gimnasio y me puse mi traje negro (porque en aquel entonces sólo los "Black Belts" podían usarlo), mi Cinto Negro recien obtenido y anudado me fuí al espejo de la sala para ver a un verdadero Kenpo Man.
No sé si les pasa a todos, pero lo que vi en el espejo fué todo lo contrario a lo que esperaba. No vi a un experto en Kenpo ni mucho menos al super hombre que creí que ese trozo de genero anudado en mi cintura me convertiría. Sólo me vi igual que siempre, igual que cuando estaba con mi cinto amarillo, con mucha más experiencia pero definitivamente con muchas pero muchas más dudas.
Al momento de cruzar esa puerta que se abre cuando rindes y apruebas tu exámen de Cinto Negro, se abrió un mundo nuevo de preguntas y cuestionamientos, lo que en un principio no niego me desilucionaron, ya que no me ví como un super-hombre, sino tan mortal como cualquiera.
Cuando me conviertí en un Black Belt, porque lo que sucede es una transfrormación, una mutación de los valores y de la forma de ver, en este caso, el Kenpo. Me dí cuenta lo ignorante, desde muchos otos puntos de vista, que soy ahora, y de lo mucho que me falta por aprender y aprehender.
Así que de nuevo, que mala suerte no haber podido asistir al seminario!!!!!!!!!!!
Brother in Kenpo.
Erick Reyes